Obra Negra: Conoce Todos los Trabajos que se Realizan en esta Etapa

La obra negra es una etapa crítica en toda construcción, esencial para asegurar la integridad estructural en proyectos que van desde casas hasta grandes edificios.

Es durante esta etapa que se pueden incorporar elementos que sumarán al valor arquitectónico y personalidad a toda construcción, como los distintos tipos de techos, arcos, bóvedas y otros detalles de diseño. ¡Continúa leyendo para entender esta fase esencial, explorar los trabajos que incluye y aprender cómo se distingue de otros procesos!

Obra negra es un término que tal vez hayas escuchado, estés o no inmerso en los sectores de la construcción, arquitectura, ingeniería civil o albañilería. Se refiere a la fase inicial de cualquier proyecto de construcción, donde se realizan los trabajos más esenciales pero que serán menos visibles una vez que la obra se encuentre terminada.

Considerada la base de cualquier proyecto arquitectónico, la obra negra en construcción abarca las tareas fundamentales para erigir la estructura principal del edificio. Este periodo culmina cuando el esqueleto está preparado para avanzar hacia los procesos de instalaciones adicionales, acabados y detalles decorativos (obra gris y obra blanca).

Esta fase involucra una serie de actividades que garantizan el orden, la eficiencia y el cumplimiento de los estándares de seguridad y calidad. Desde la planeación hasta la coordinación de los equipos de trabajo, cada paso prepara el terreno para comenzar con la obra. A continuación te explicamos las diversas etapas de la obra negra:

• Actividades preliminares: se realizan estudios del suelo, diseño arquitectónico, cálculos estructurales y se presentan los planos de la obra para su evaluación y futura aprobación, esto lo llevan a cabo los arquitectos, ingenieros y los clientes.
• Actividades administrativas: el encargado de la obra debe realizar las solicitudes correspondientes para obtener los permisos legales conforme a las normas de construcción vigentes.
• Actividades organizativas: incluyen la gestión de materiales, herramientas y mano de obra.

La obra negra comprende varias tareas críticas que, como mencionamos, garantizan la seguridad y estabilidad del proyecto. Por ello, es importante destacar que la complejidad y los detalles de cada una de ellas puede variar dependiendo de las técnicas utilizadas. A continuación te explicamos los trabajos de construcción que se realizan en esta etapa.

Se colocan señalizaciones para restringir el acceso a personas no autorizadas y se efectúan labores de limpieza para retirar la basura, hierba, arbustos y restos de construcciones antiguas. En este punto es crucial contar con un plan de gestión de residuos y asegurar que el área de construcción quede libre de contaminantes.

Una vez que el área en la que se realizará la obra está limpia, se procede a nivelar la superficie de la misma. De este modo el terreno será uniforme y óptimo para sentar las bases de la construcción. En caso de encontrar raíces de árboles, deben ser extraídas.

La cimentación es la base fundamental de la obra negra, ya que dicho elemento es el responsable de transmitir las cargas de la edificación al terreno de manera efectiva y uniforme. Es una etapa crucial que determina la estabilidad y la durabilidad de la estructura a largo plazo.

Es una de las fases más importantes dentro de la obra negra, ya que define la forma y la resistencia del proyecto. Aquí se erige el esqueleto principal, mismo que soportará el peso total de la edificación. En este sentido, al hablar de la estructura, debemos dividirla en los siguientes elementos:

• Entrepisos: esenciales para dividir la edificación en diferentes niveles y proporcionar la estructura horizontal que soportará las cargas de los pisos superiores.
• Muros: elementos, que, al ser estructurales, deben soportar las fuerzas verticales, mientras que también pueden cumplir una función de división de espacios.
• Techo: sirve para proteger de las condiciones climáticas tanto a los elementos interiores de la obra como a las personas que hacen uso de la misma.

Los materiales empleados durante la obra negra son cruciales por su papel en asegurar la solidez del proyecto. Dichos elementos son cuidadosamente seleccionados basándose en su durabilidad y resistencia, cada uno aportando cualidades específicas esenciales para la estabilidad del edificio. Entre los más comunes se encuentran los siguientes:

• Madera
• Malla electrosoldada
• Blocks de concreto o ladrillos
• Varilla de acero
• Bultos de cemento
• Alambre recocido
• Grava y arena

Recuerda que elegir materiales de construcción de calidad, desde su planeación, puede ahorrar un sinfín de problemas y garantizar la integridad de una obra. Además, una adecuada selección, fundamentada en las normas ATSM vigentes, puede traducirse en beneficios como los siguientes:

• Asegurar el rendimiento del presupuesto según lo planeado
• Garantizar el funcionamiento óptimo de sus cualidades
• Ayudan a preservar la seguridad de la obra y el personal
• Contaminan menos y tienen mayor eficiencia energética
• Por ser más duraderos, el valor de la propiedad se mantiene o se revaloriza.

El uso de materiales de baja calidad no sólo afecta la calidad y seguridad de una estructura, sino que también puede poner en riesgo tanto a las personas que la construyen, como de quienes la habitarán y su entorno.

Es muy relevante comprender las diferencias entre obra negra, obra gris y blanca, puesto que cada una de ellas cumple un rol específico y esencial en el desarrollo del proyecto. A continuación, te presentamos una tabla comparativa que destaca las características principales, componentes y enfoque de cada una de estas etapas:

¡Descubre más acerca de estas tres etapas y amplía tus conocimientos en el sector de la construcción en el siguiente video!:

En términos generales, la diferencia más significativa entre estos tipos de obra radica en la posibilidad de ser habitadas en su totalidad. Una obra negra está muy lejos de las condiciones para ser ocupada, mismas que serán proporcionadas en su evolución hasta la obra blanca, y de las que forman parte las instalaciones, conexiones, servicios y acabados.

En resumen, la obra negra es la columna vertebral, estableciendo las bases fundamentales sobre las cuales se construirán las fases posteriores. Su correcta ejecución es crucial para la seguridad, estabilidad y durabilidad del edificio, lo que subraya la importancia de contar con profesionales calificados y materiales de primera calidad desde el inicio del proyecto.

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